Salud paraliza los pagos a sus proveedores y a los centros concertados por falta de liquidez

La paralización de los pagos no solo afecta a los proveedores de servicios, materiales y tecnología sanitaria. Los centros concertados tampoco están cobrando por la atención que prestan a pacientes derivados desde la sanidad pública. «Tenemos pendientes de cobro facturas de los últimos tres meses, es una situación que no vivíamos desde hacía años. Hemos buscado un acuerdo con una entidad financiera para que nuestros centros puedan afrontar sus costes de aquí a final de año», explican fuentes de la Unión Murciana de Hospitales (UMHC), la patronal de la sanidad privada.

A finales de abril, el SMS tardaba una media de 145 días en abonar sus facturas a las empresas proveedoras, a las que debía 63 millones de euros. Son datos de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) que sitúan de nuevo a la Región de Murcia como la segunda comunidad más morosa. Solo Valencia acumula mayores retrasos en los pagos, y en este caso hay que tener en cuenta el impacto de la DANA sobre las arcas públicas.

Desde abril, la situación ha empeorado. Lo que más preocupa a los proveedores es que la paralización de los pagos se extienda hasta 2026. «Agradecemos al SMS que nos haya avisado, y entendemos su situación. Pero somos pequeñas empresas que no tenemos un mercado alternativo a la sanidad pública regional», advierte la asociación.

El año pasado, los proveedores murcianos llegaron a un acuerdo con Salud que hasta ahora había permitido agilizar los cobros. Aquellas empresas para las que el SMS representa más del 70% de su facturación se han podido acoger a una vía prioritaria que dado buenos resultados. «Nos han estado pagando las facturas a dos o tres meses, mientras que otras empresas más grandes tienen cobros pendientes desde febrero o incluso desde el año pasado», explica la asociación.

Sin embargo, tanto unos proveedores como otros sufren otro problema: el atasco en la emisión de las facturas. «Desde que se implanta una prótesis a un paciente hasta que se emite la factura pueden pasar tres, cuatro o incluso cinco meses. Hay un cuello de botella en estos trámites en las áreas», explican los proveedores.

Muchos empresarios temen ahora el impacto de la paralización de los pagos. «Nos dicen que hasta 2026 no pueden pagarnos, y la única alternativa que nos queda es ir a un banco a pedir préstamos», se queja uno de los afectados. «Estoy tratando de cobrar los intereses de demora, pero ni siquiera eso están pagando», añade.

Los proveedores y también los centros concertados están ahora pendientes de la aprobación del techo de gasto de la Comunidad y de los presupuestos de 2026. «Esperemos que de esta forma se ponga solución», confían fuentes de la Unión Murciana de Hospitales.

Pero el problema del SMS es estructural. Previsiblemente, el aumento presupuestario de 2026 será insuficiente para afrontar los crecientes gastos de la sanidad pública regional.

La Región de Murcia lideró en 2023 (último año con datos disponibles) el incremento del gasto sanitario en España. En concreto, la partida creció un 10%, hasta los 3.325 millones de euros. Pero al tiempo que el gasto se dispara, los fondos que se destinan a sufragar la factura sanitaria no aumentan al mismo ritmo. La Región de Murcia fue, de hecho, la segunda comunidad que menos dinero por habitante destinó en los presupuestos de 2024 a su sistema sanitario.

Como resultado de este enorme desfase, el agujero en el Servicio Murciano de Salud se agranda. El déficit contable acumulado alcanzaba al cierre de 2023 los 3.621 millones de euros, tras generarse otros 752 millones de déficit en ese ejercicio.

El SMS cerró 2023 con una deuda con sus proveedores de 440 millones de euros, una cifra récord que representa un incremento del 132%. La estimación de los intereses de demora generados a lo largo de ese ejercicio supera los 17 millones de euros.

De la situación financiera del SMS viene alertando reiteradamente el Tribunal de Cuentas. En sus informes de fiscalización, el organismo advierte de que «los créditos aprobados en el presupuesto del Servicio Murciano de Salud se encuentran claramente por debajo de las necesidades reales para la prestación de los servicios sanitarios en la Región».

Las consecuencias de esta asfixia financiera las pagan, entre otros, los proveedores. Pese a su pequeño peso demográfico, la Región de Murcia soporta el 7% de toda la deuda del Sistema Nacional de Salud con los proveedores de tecnología. Solo Andalucía, Madrid y Comunidad Valenciana superan este porcentaje.

En su último informe, el Tribunal de Cuentas advertía de que «el crecimiento y enorme rigidez del gasto sanitario en la Comunidad Autónoma», muy superior al aumento del PIB, «provoca una situación financieramente insostenible a largo plazo que requiere una intervención inmediata que garantice que estos gastos puedan ser cubiertos».

La Consejería de Salud asegura que «el Gobierno regional trabaja para garantizar todos los pagos a los proveedores a pesar de la infrafinanciación que padece la Región de Murcia». Este departamento no concreta si habrá liquidez suficiente para que los proveedores y los centros concertados puedan cobrar las facturas en los próximos meses, aunque recuerda que los presupuestos de la Comunidad se han desbloqueado tras el pacto alcanzado entre PP y Vox.

«Los proveedores priorizados, entre los que se encuentran los de alimentación de pacientes, limpieza, seguridad y mantenimiento tienen pagadas sus facturas hasta el primer trimestre del año», explica Salud.

La Consejería culpa de la situación al Gobierno de España, «que está asfixiando a las comunidades autónomas, especialmente a las peor financiadas, porque sigue sin aprobar la actualización de las entregas a cuenta y sin aportar el 'extra-FLA'». Ambos conceptos «suponen retener unos 1.190 millones de euros, una cantidad inasumible para una región infrafinanciada como la nuestra», advierte Salud. El Gobierno regional calcula que «estamos recibiendo anualmente unos 1.600 millones menos» de los que correspondería.

Las dificultades del SMS para pagar a sus proveedores no son nuevas. En la crisis de 2008 a 2011, las empresas suministradoras sufrieron enormes retrasos que empezaron a solventarse con los mecanismos extraordinarios que puso en marcha el Gobierno central a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). También se acudió a mecanismos como el 'confirming', que permite a las empresas cobrar de forma anticipada a través de los bancos. Ahora, sin embargo, la respiración asistida que supone el FLA no está funcionando, según denuncia la Consejería de Salud.

Mientras, se mantienen los problemas estructurales de la sanidad murciana. La Región de Murcia es una de las comunidades con menor presupuesto sanitario por habitante, pero al mismo tiempo se sitúa entre las que más gastan por habitante, según han advertido los informes de la Asociación en Defensa de la Sanidad Pública (ADSP).