El petróleo vertido se infiltra dos metros en la finca de almendros de Calasparra

La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) tomó muestras para «analizar cómo está pudiendo influir» el vertido «en la masa de agua subterránea próxima al punto de rotura del oleoducto» en el paraje de Casas Coloradas. El viernes constató que el derrame no había afectado al dominio público hidráulico en el curso del río Quípar, situado a 1,8 kilómetros de distancia. LA VERDAD preguntó ayer sobre la situación a la CHS, que depende del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco), pero no respondió.

El Seprona continúa con su investigación del vertido que, según el consejero de Medio Ambiente, Juan María Vázquez, alcanzó 2.000 metros cuadrados. Su departamento sigue evaluando los posibles daños en la Zona de Especial Protección de Aves (Zepa) Llanos del Cagitán. Y fuentes de la compañía indicaron que «las labores finales de limpieza avanzan a buen ritmo y se estima que concluirán en dos días». «Se han desplegado los medios técnicos y humanos necesarios; las tareas se han desarrollado de manera ininterrumpida», indicaron.

Concretaron que «se han utilizado cubas de aspiración, camiones, tractores, máquinas excavadoras y contenedores para la retirada y posterior tratamiento de los residuos». El propietario señaló que al menos se han llenado ya treinta grandes contenedores. Tienen capacidad para 6 metros cúbicos.